Volkswagen ha confirmado que planea introducir versiones híbridas de sus populares modelos Tiguan y Atlas en el mercado norteamericano, aunque estos lanzamientos aún tomarán algunos años. El anuncio se realizó durante el Auto Show de Nueva York 2025, donde el fabricante alemán reconoció que subestimó la velocidad con la que los consumidores estadounidenses adoptarían los vehículos eléctricos puros.
Aunque en Europa la marca ya comercializa híbridos convencionales y enchufables, en Estados Unidos Volkswagen apostó más fuerte por los modelos totalmente eléctricos. Sin embargo, la realidad del mercado mostró un mayor interés por los híbridos tradicionales, lo que obligó a la empresa a reconsiderar su estrategia.
Cambio de rumbo en Norteamérica
Durante una reunión con un grupo reducido de medios en el evento de Nueva York, el CEO de Volkswagen of America, Kjell Gruner, confirmó que la compañía tomó la decisión de ofrecer dos modelos híbridos adaptados específicamente al mercado estadounidense.
Uno de ellos será el Tiguan híbrido, una respuesta a la demanda creciente por opciones más eficientes sin abandonar completamente los motores de combustión interna. Aunque su llegada aún está a un par de años, Volkswagen aprovechó el evento para presentar una versión deportiva del Tiguan que se incorporará a la gama 2026.
En el mismo periodo, el Atlas también contará con una versión híbrida. Esta variante llegará junto con la nueva generación del SUV de tres filas, prevista para 2027. No obstante, Gruner aclaró que la versión híbrida no estará disponible desde el inicio del ciclo comercial del nuevo modelo.
Híbridos convencionales, no enchufables
Un detalle importante es que estos nuevos modelos no serán híbridos enchufables. En cambio, se tratará de híbridos tradicionales, lo que significa que no requerirán que los conductores modifiquen sus hábitos de carga. Según Gruner, esta elección permite mantener los costos y el peso del vehículo bajo control, lo cual es clave para la competitividad.
Además, la compañía está atenta a cómo evolucionarán las regulaciones medioambientales en Estados Unidos durante los próximos dos años, ya que la presencia o ausencia de incentivos fiscales para vehículos de bajas emisiones podría influir en sus decisiones futuras.
Producción local en lugar de importaciones
Volkswagen también expresó su intención de fabricar tanto los híbridos como sus baterías en América del Norte. Aunque importar las versiones europeas sería más rápido, la empresa considera que la producción local es más estratégica a largo plazo, especialmente frente a las incertidumbres regulatorias y comerciales.
Por último, Gruner dejó abierta la posibilidad de que el Volkswagen Jetta también reciba una versión híbrida suave (mild hybrid) más adelante. Cabe recordar que el Jetta ya contó con una versión híbrida en el pasado, aunque fue retirada del mercado tras el año modelo 2016.
Con esta nueva estrategia, Volkswagen busca posicionarse de forma más sólida en un mercado cambiante, en el que los híbridos están ganando terreno mientras los eléctricos aún enfrentan ciertas barreras de adopción.